martes, 17 de abril de 2007

EL GRIS

Y así están las cosas. Cuando dormir no me tranquiliza porque Morfeo se olvida de mi cama, cuando quiero irme y me atan cuerdas invisibles que me lo impiden, cuando en apariencia soy un ser distendido y, sin embargo, mi interior es un hervidero de nervios. Aún así sigo tratando de descifrar la realidad absurda, quizás, por momentos, diciendo una vez más lo que todos ya saben.

No hay comentarios: